¡ADAM Y EVE! guionizada por Hideo Yamamoto (Homunculus) y dibujada por Ryoichi Ikegami (Santuario) un verdadero junte de titanes. Un thriller sobrenatural cargado de violencia desmedida. El impecable dibujo de Ikegami es un lujo, regalando momentos para el goce y disfrute del lector. Y la historia de Yamamoto es tan atrayente, que no podrás dejar el tomo apartado para continuar otro día.
La historia se desarrolla en una extraña reunión privada de un reducido y selecto grupo de yakuzas. De repente, los mafiosos comienzan a ser asesinados por lo que parece una pareja formada por una mujer y un hombre invisibles a sus ojos.
Yamamoto construye una historia que avanza a un ritmo vertiginoso por momentos y que atrapa al lector desde el principio. Aquí nos sorprenden desde la misma yakuza, que tiene unas peculiaridades concretas, hasta el dúo de asesinos, invisibles para el ojo humano salvo por los zapatos que llevan. Así mismo, la historia está narrada desde la visión de Smell, uno de los yakuza asistentes a la reunión y al que vemos “beber” las copas a través de los orificios de la nariz. Esto nos deja una extraña sensación de no tener un protagonista arquetípico, sino más bien un antagonista, puesto que en esta historia no hay nadie inocente, más bien todo lo contrario.
Para dar esta carga extrema, el dibujo de Ikegami le sienta fenomenal a la obra. Con un estilo muy realista, grandes viñetas y no pocas splash pages, el dibujante se regala momentos en los que puede lucir todo su potencial. Mucha viñeta grande y mucha acción se traduce en que los dos tomos que dura la obra se consuman bastante rápido. Así que por favor, disfrutad y saboread cada página así como el frenético ritmo de la historia.